Farruca te sientes

y pronto se te pasará

que la alegría flamenca

si no es por buen motivo

y auténtico su sentir,

como te viene, se va.

Eso decían las madres

mineras, de las minas viudas

y viudas del mar,

que yo recuerdo de niña

escuchar sus ronroneos

cual canasteras sin par

mirar a sus hijas con nervio

y el entrecejo arrugar.

Con el viento del nordeste

repetían sin cesar,

mulata has de volverte

hija mía, de la mina y del mar,

porque blanca y bella

te desean,

solo para pecar.

FARRUCA  MINERAS  CANASTERAS  NERVIO  MULATA

Palabras de Pilar Alcázar

África Sánchez López