Solo porque quiero

soy un grito,

porque no quiero ser silencio,

solo quiero ser verdad

y a la verdad me debo.

Me entrego al amor

porque así lo quiero,

y solo porque quiero

río y lloro,

todo al mismo tiempo,

nada me avergüenza

cuando la verdad defiendo

y digo libremente

lo que siento.

Empieza ya, a no dolerme

el reproche traicionero

y solo porque yo quiero

conseguiré que no duela

en absoluto,

sin que pase mucho tiempo.

Porque son míos mis sueños,

mías mis decisiones,

lo que como y lo que bebo

lo pago con mi dinero,

porque todo lo he ganado

con trabajo muy honesto.

Solo porque quiero

soy un grito,

me callarán si me muero

y aun así, no se descuiden,

tapen mi tumba

con plomo y cemento,

vuélvanse sordos y ciegos

porque yo, si quiero,

puedo seguir muy viva

en todos los cementerios.

África Sánchez López