Nunca estaba tu boca
pendiente de la apertura
de mis labios,
ni tu mirada atenta
a la dilatación de mi pupila,
tu proceder ha sido siempre
correcto y educado,
me has vestido de encajes el alma,
el corazón adornado
de joyas con brillo falso,
has pintado un hogar
ideal para la galería,
hemos copulado
como capitán y soldado
sin habernos besado.
Con un rotulador de plata
en un extremo,
me escribías la hora
de volver a casa,
siempre me querías
con el collar de perlas
ahogando mi garganta,
pero, una noche de luna llena,
te dije adiós.

PENDIENTE PUPILA ROTULADOR COLLAR LUNA

África Sánchez López