Me querías fiel pero no libre

atándome al tener,

cuando yo sólo, ser, quería,

precisos dibujabas mis contornos

para borrarme y no ser vista

por otros, que no fueran tus ojos.

Iba pasando la vida

con el duelo en mi mirada

y en la palma de mis manos

huellas de desesperanza.

Me hablabas lento y temible

perdonando mi extravío,

perdonándome la vida,

la culpa, haciendo mella en mi rostro

provocaba tu sonrisa

y eras, entero, la dicha y el gozo.

Iban pasando los días,

y la muerte agazapada

entre mi piel y mis uñas,

esperaba con  su guadaña.

Y de pronto,

sucedió,

llegó, vino…

la vida, la libertad, el estallido,

la rebelión del más débil,

la negación del suicidio,

Quiero vivir

y no quiero que sea contigo,

quiero soñar

y no puedo con tus gritos,

quiero reír

y sólo llorar consigo,

Basta!!!!!

La vida me está llamando,

Voy, voy dignidad,

Espérame, me voy contigo.

África Sánchez López